jueves, 23 de febrero de 2012

¿Mi antología?

Por Jessica Leventoux


Trato de entender el desasosiego, mientras la Maga me cuenta sobre el Rocamadeur y sostiene un retazo de tela rojo.
Busco entre la niebla pero me da náuseas.
Mi ser licantrópico necesita deshacerse de esa semejante dualidad y escapar a los bosques para encontrarme con mi esencia.
El pájaro rompe el cascarón, el cascarón es el mundo, ese utópico que me distrae.
Un conejo blanco, burgués y con guantes, debería también poder vomitar conejos que quepan en la palma de mi mano.
Más allá del bien y el mal tendríamos que tener en cuenta el elogio de la locura... que vendría a ser como morder el centeno y reinar sabiamente
adiestrar una rosa podría ser tan triste como una suite de Bach o un Judas como amigo.

1 comentarios:

guille creo que los dos textos que subiste son el mismo
o así me aparece!

Publicar un comentario